by Yiesell Rayon
California Hands & Voices Los Angeles County Area Representative
Four years ago I began an amazing journey I never expected. My son did not pass the newborn hearing screening and we were referred to an audiologist. He was just six weeks old when we had our first audiology appointment. I can still remember hearing the audiologist say,”I have good news and bad news. Which one do you want first?” Regardless which one I decided to hear first, I needed to know the results of my son’s auditory brainstem response (ABR) exam.
“Just let it out”, I replied. His facial expression confused me as he smiled and said, “The bad news is your son was born with a hearing loss, but the good news is we have wonderful technology.”
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At that moment, I felt I had gone deaf myself. I didn’t hear another word after that. Negative thoughts kept circling inside my head. How would my son know I loved him if he couldn’t hear me? How would I communicate anything with my son? Suddenly I was thinking I would never hear his sweet voice calling me “mom”. He would never enjoy the beauty of music and dance at our family gatherings. I went home devastated and terrified. What would become of his life if he couldn’t hear?
I immediately had emotional support from family and close friends, but nobody really understood our situation. Nobody in my family was deaf or even knew someone who was. My husband made the effort to pretend he was strong, but I knew he was struggling. Our son was the first in the family to be diagnosed with hearing loss and we had no idea what to do next. I felt so lost that I did not want to deal with the truth. For weeks, we continued to put early intervention to the side. I was in denial. I kept telling myself the audiologist had no idea how to read the audiogram. Maybe our son was too young to be tested. How did a simple computer determine my son’s ability to hear? It took me a few months before I accepted his hearing loss, but once I did, I knew I was ready to teach my son nothing was going to hold him back.
Allow me to introduce Marcus Elijah Rayon, Jr., better known as Markie. Markie just turned 4 years old in September. He has bilateral progressive sensorineural hearing loss. He was born with a mild hearing loss, but within a year he lost majority of his hearing. Without hearing aids, Markie now has severe hearing loss. We have embraced his deafness and made the commitment to raise him to be proud of being Deaf. Markie is in a total communication class with full access to American Sign Language (ASL) and speech therapy. He is doing amazingly well in school and every day he is showing us how easily heis overcoming his hearing challenge. Markie is energetic, loving, funny, smart, and stubborn just like any other four-year-old.
As parents we always want what is best for our children. When my son was diagnosed with hearing loss, I thought life had ended for me. It was a difficult situation for our family, but it did not take long for me to snap out of my “disappointment.” I quickly realized there is so much I can do as his mother to ensure he reached his fullest potential. I started attending all the Deaf and Hard of Hearing (DHH) events in our area. I wanted to meet Deaf adults who could guide me in raising a Deaf son. Soon after I grew an ambition to help other DHH families. Almost three years ago I joined CA Hands & Voices as an Area Representative for LA County. I now find myself involved with other organizations like the National Center for Hearing Assessment and Management (NCHAM) and Deaf Latinos Organization out of the City of Los Angeles.
I was recently asked to join Hands & Voices Headquarters for a special project for Spanish speaking support. Our ultimate goal is to provide all Hands & Voices chapters’ with endless resources in Spanish. As a Latina and Spanish speaking DHH mother, I understand the need and desire for DHH resources in Spanish. We are working hard to ensure resources in Spanish are available for Latino families nationwide.
I believe it is our duty as parents to inspire our children. We should teach our Deaf and Hard of Hearing (as well as our hearing) children that they are capable of accomplishing anything they desire. Sometimes we make situations more complicated than they are. We tend to focus on the negatives while forgetting about all the positive things in life. Today, I challenge you. Take a step forward today and get out of your comfort zone. Reach out to a DHH organization and get involved. Meeting new DHH families and professionals will always be beneficial for your entire family.
For more information on how to get involved with Hands & Voices in your state, feel free to contact me!
Yiesell Rayon
California Hands & Voices Los Angeles County Area Representative
Spanish Support
Phone: (909) 325-5089
Email:
California Hands & Voices website: www.cahandsandvoices.org
Headquarters website: www.handsandvoices.org
Una Esperanza Latina
by Yiesell Rayon
Representante del Condado de Los Angeles
Manos y Voces de California
Hace cuatro años comencé un camino asombroso que nunca esperé. Mi hijo no pasó la prueba de audición del recién nacido y nos remitieron a un audiólogo. Mi hijo tenía sóloseis semanas de edad cuando tuvimos nuestra primera cita. Todavía me acuerdo de escuchar el audiólogo decir: “Tengo buenas y malas noticias. ¿Cuál quieres primero?” A pesar de todo, lo que necesitaba era saber los resultados de el examen de la respuesta auditiva del tronco cerebral (ABR) de mi hijo. “Dígame lo que necesito saber”, le contesté. Su expresión facial me confundió como él sonrió y dijo: “La mala noticia es que su hijo nació con una pérdida auditiva, pero la buena noticia es que tenemos una tecnología maravillosa.”
En ese momento, sentí que había quedado sorda yo misma. No escuche una palabra más después de eso. Los pensamientos negativos estuvieron dando vueltas en mi cabeza. ¿Cómo va mi hijo a saber que lo amo si no me podía oír? ¿Cómo me voya comunicar con mi hijo? De repente me puse a pensar que nunca iba escuchar su dulce voz que me llamaba “mamá”. Él nunca disfrutaría de la belleza de la música y la danza en nuestras reuniones familiares. Me fui a casa devastada y aterrorizada. ¿Qué seríade su vida si no podía oír?
Inmediatamente tuve apoyo emocional de la familia y amigos cercanos, pero nadie realmente entiende nuestra situación. Nadie en mi familia era sordo o incluso conocía a alguien que era. Mi marido hizo el esfuerzo para fingir que era fuerte, pero yo sabía que estaba luchando. Nuestro hijo fue el primero en la familia a ser diagnosticado con pérdida de audición y no teníamos ni idea de qué hacer. Me sentí tan perdida que yo no quería aceptar a la verdad. Durante semanas, continuamos poniendo los servicios de la intervención temprana a lado. Yo estaba en la negación. Me mantuve diciendo que al audiólogo no tenía idea de cómo leer los resultados de el examen. Tal vez nuestro hijo era demasiado joven para ser probado. ¿Cómo es que unsimple ordenador pueda determinar la capacidad de oir de mi hijo? Me tomó un par de meses antes de que yo aceptara su pérdida de audición, pero una vez que lo hice, yo sabía que yo estaba dispuesta a enseñarle a mi hijo que nada iba a detenerlo en la vida.
Permítanme presentarles a Marcus Elías Rayón, Jr., más conocido como Markie. Markie acaba de cumplir 4 años en septiembre. Él tiene una pérdida auditiva neurosensorial progresiva bilateral. Nació con una pérdida de audición leve, pero dentro de un año perdió la mayoría de su audiencia. Sin audífonos, Markie ahora tiene pérdida auditiva severa. Hemos abrazado su sordera y hecho el compromiso de criarlo orgulloso de ser Sordo. Markie pertenece a una clase de comunicación total con pleno acceso a la Lenguade Signos Americana (ASL) y terapia del habla. Él está haciendo increíblemente bien en la escuela y todos los días nos está mostrando lo fácil que es superar su reto de audiencia. Markie es enérgico, cariñoso, divertido, inteligente y terco como cualquierotro niño de cuatro años de edad.
Como padres siempre queremos lo mejor para nuestros hijos. Cuando mi hijo fue diagnosticado con pérdida auditiva, pensé que la vida había terminado para mí. Era una situación difícil para nuestra familia, pero no pasó mucho tiempo para mí para que rompiera la “decepción”. Rápidamente me di cuenta de que hay mucho que puedo hacer como su madre para asegurarme de que alcance su máxima potencial. Comencé a asistir a todos los eventos para niños sordos y con problemas de audición (DHH) en nuestra área. Quería conocer a adultos sordos que me podrían orientar en la crianza de un hijo sordo. Poco después, crecío la ambición de ayudar a otras familias DHH. Hace casi tres años me uní con Manos y Voces de California como Representante del Condado de Los Ángeles. Ahora me encuentro involucrada con otras organizaciones como el Centro Nacional de Audición Evaluación y Gestión (NCHAM) y Deaf Latinos Organization de la Ciudad de Los Ángeles.
Hace poco me invitaron a unirme a Sede de Manos y Voces para un proyecto especial de apoyo para familias que hablan español. Nuestro objetivo final es proporcionar a todos los capítulos de Manos y Voces con infinidad de recursos en español. Como madre Latina que habla español, entiendo la necesidad y el deseo de los recursos DHH en español. Estamos trabajando duro para asegúranos que los recursos en español están disponibles para las familias Latinas en todo el país.
Creo que es nuestro deber como padres de inspirar a nuestros hijos. Debemos enseñar a nuestros hijos Sordos e Hipoacúsicos (así como a nuestros hijos con buena audiencia) que son capaces de lograr cualquier cosa que deseen. A veces hacemos las situaciones más complicadas de lo que son. Tenemos la tendencia a centrarnos en los aspectos negativos, mientras olvidamos las cosas positivas en la vida. Hoy, te reto. Tome un paso adelante y salga de su comodidad. Contacte a una organización DHH y participe. Reuniones con nuevas familias y profesionales DHH siempre será beneficioso para toda la familia. Para obtener más información sobre cómo participar con Manos y Voces, no dude en ponerse en contacto conmigo a:
Yiesell Rayon
Representante del Condado de Los Angeles
Manos y Voces de California